lunes, 29 de septiembre de 2008

Te acordas?

Esta claro que la llegada de Internet ha revolucionado profundamente mi mundo. Vivir de este lado del charco tiene muchas ventajas y algunos contratiempos que he ido resolviendo o, mejor dicho reduciendo, con la existencia de las nuevas tecnologías. Este fin de semana, gracias al invento de las nuevas redes sociales he conseguido conectar con mis recuerdos de la infancia a orillas del Rio de la Plata y tras haberme actualizado de los acontecimientos sufridos durante tantísimos años en la vida de quienes fueron mi primer beso, mi mejor amiga, la Señorita Patricia… encontré esto que les dejo… un reflejo de lo que hoy siento.


¿Te acordás de aquel tiempo en que las decisiones importantes se tomaban mediante un práctico “Ta Te Ti suerte para mí”?
Se podían detener las cosas cuando se complicaban con un simple “pido gancho!”
Los errores se arreglaban diciendo simplemente “va de nuevo”.
Las discusiones terminaban con un “pan y queso”, o con un “biennnnnnnn!”.
El peor castigo y condena era que te hicieran escribir cien veces “no debo”.
Tener mucho dinero, sólo significaba poder comprar mas provincias jugando al “Estanciero”, o comprarte un helado, o un paquete de palitos salados en el recreo.
Llenar un frasco con hormigas podía mantenernos felizmente ocupados durante toda una tarde.
Siempre había una forma de salvar a todos los amigos, y bastaba con un grito de “piedra libre para todos los compañeros”.
No era raro que tuvieras dos o tres “mejores amigos”.
“Es muy viejo…” y así te referías a cualquiera que tuviera mas de veinte años.
Siempre descubrías tus nuevas capacidades y habilidades a causa de un “¿a que no te animás?”…No había nada que fuera mas lindo y prohibido que jugar con fuego, a pesar de que algún mayor te amenazara con que “el que juega con fuego a la noche se hace pis”.
“El último es cola de perro” era el grito que te hacía correr como un desaforado, hasta que sentías que el corazón te salía del cuerpo.
El Poliladron era sólo un juego para los recreos, y era mucho más divertido ser ladrón que policía.
Las bombitas de agua eran la más moderna, eficiente y poderosa arma que se había inventado.La desilusión era haber sido elegido último para el equipo de tu escuela.
Venenosa se refería solo a un tipo de “mancha”, y no a ciertas alimañas o algunas personas.
Para viajar desde la tierra al cielo, sólo tenías que jugar “rayuela”.
La red de una cancha de tenis tenía la altura perfecta para jugar un partido de voley y las reglas… no importaban demasiado.
“Verdad / Consecuencia”…Si eras nena siempre elegías el color amarillo, ya que sólo te preguntaban si era verdad que te gustaba……
En cambio si eras varón, siempre e indefectiblemente elegías el color rojo… y ahí nomás pedías un beso… en la boca.
Los hermanos mayores eran el peor de los tormentos pero también eran los más celosos, fieles y feroces protectores.
Haber llevado un arma a la escuela significaba que te habían atrapado con una onda de rulero.
Nunca faltaban los huevos de chocolate y golosinas que traía el conejo de Pascuas, ni el billete nuevo debajo de la almohada que te dejaba “el ratón Pérez”… todo a cambio de tus dientes de leche.
Guerra… sólo significaba arrojarse trozos de tiza y bollos de papel durante las horas libres… la guerra era algo que había sucedido antes de que naciéramos y que nunca volvería a suceder.
Los helados, por supuesto, constituían el grupo de los alimentos básicos y esenciales.
Tu bici se transformaba en una poderosa moto sólo con colocarle un cartón duro, o una chapita o una bombita de agua inflada entre los rayos de la rueda…Si tu bici tenia el asiento banana… bue… eras el capo máximo de la cuadra.
Cambiar figuritas en el patio del colegio…. si eras de los más chicos siempre aparecía uno de los grandes y te decía que te daba un toco de figuritas por una tuya… Claro, lo que vos no sabías era que esa que tenías en la mano era la más difícil del álbum.
Las situaciones… raras las llamábamos “afilar”, “atracar”, “bailar, cheek to cheek”, “chapar”, “contigo pan y cebolla”, “corto con”, “ir a más alto”, “franelear”, “fulana/señorita”, “fulana gusta de”, “fulano habla con”, “largaste o te largo?”, “me arreglé con”, “pirovar”, “te vino?”, “eso”, “vos te dejás?”.

Si ustedes pueden recordar la mayoría de estas cosas entonces significa que realmente han estado vivos…. que han tenido una infancia feliz y que el niño que todos tenemos adentro todavía sigue vivo.
Por lo menos yo….. me acuerdo de todo eso.
A todos nos viene bien tener siempre en mente esos tiempos en que todo era distinto.
Preservemos siempre ese pedacito nuestro en el que todavía somos niños, porque es el que nos hace relacionarnos entre nosotros y con la vida de una forma más pura y más honesta.
Ésto se lo dedicamos a … cualquiera de nuestros amigos… que necesita un pequeño descanso en su agitada y estresada vida de adulto…Y que el último grite: “¡¡¡¡PIEDRA LIBRE PARA TODOS LOS COMPAÑEROS!!!!”

Así nos salvamos todos.


Mario Pergolini - Eduardo De la Puente

miércoles, 24 de septiembre de 2008

A mis 28



Hoy me permito ser imperfecta, levantarme a la hora que se me da la gana y llegar tarde a trabajar.


Hoy me divierto, grito, lloro, pongo a Páez a todo volumen y bailo sobre la cama aunque la vecina se queje de mis excesos.

Alzo la copa, brindo por mi pasado, emborracho mi corazón y salud!

martes, 23 de septiembre de 2008

Un cuento lleno de ventajas...

Si tu me dejas, si me das tiempo...

Jugamos?

Esta noche me propongo un juego.

Juego a que estoy contenta, a que la distancia no me duele y esta tristeza se barre con el tiempo. Juego a que no somos presos del mismo sol y que la luna sale sin ti.

Juego a que el tiempo y su efecto fugaz me ayudan a olvidar, a que la herida ya ha cicatrizado, a que se borran de mi memoria tus ofensas, a que he comprendido sanamente que nuestro amor no es posible…

Juego a que la razón despeñó su suerte y hemos quedado “felizmente” en tablas…

Juego a que no recuerdo tu aroma a hierbabuena, a que tu silueta ya no se dibuja sobre mis sábanas, a que ya no siento tus manos ni tu mirada.

Juego a que camino por la vida feliz de haberte olvidado, a que ya no eres el dueño de mis risas ni de mis llantos.

Juego a que en el super ya no venden chocolate blanco, a que ya no me gustan los boababs ni las croquetas de tu madre.

Esta noche juego a que ya no te amo y que es facil comprender que no eres para mi.

Juego a que te he olvidado… a que mi alma no quedó detenida en un tiempo sin reloj.
Juego a que he descubierto rápidamente que esta historia fue de la vía láctea, a que habrá otro Principito y otra flor…

lunes, 22 de septiembre de 2008

Cuentos para dormir: La Isla de los Sentimientos.



Hubo una vez una isla donde habitaban todas las emociones y todos los sentimientos humanos que existen. Convivían, por supuesto, el Temor, la Sabiduría, el Amor, la Angustia, la Envidia, el Odio... Todos estaban allí.
A pesar de los roces naturales de la convivencia, la vida era sumamente tranquila y hasta previsible. A veces la Rutina hacia que el Aburrimiento se quedara dormido, o el Impulso armaba algún escándalo, pero muchas veces la Constancia y la Conveniencia lograban aquietar el Descontento.
Un día, inesperadamente para todos los habitantes de la isla, el Conocimiento llamó a reunión.


Entonces, el Conocimiento dijo:

-Tengo una mala noticia para darles: La isla se hunde.

Todas las emociones que vivían en la isla dijeron:

-¡No, cómo puede ser! ¡Si nosotros vivimos aquí desde siempre!

El Conocimiento repitió:

-La isla se hunde.
-¡Pero no puede ser! ¡Quizá estás equivocado!
-El Conocimiento casi nunca se equivoca -dijo la Conciencia dándose cuenta de la verdad-. Si él dice que se hunde, debe ser porque se hunde.


-¿Pero qué vamos a hacer ahora? -se preguntaron los demás.

Entonces, el Conocimiento contestó:

-Por supuesto, cada uno puede hacer lo que quiera, pero yo les sugiero que busquen la manera de dejar la isla... Construyan un barco, un bote, una balsa o algo que les permita irse, porque el que permanezca en la isla desaparecerá con ella.

-¿No podrías ayudarnos? -preguntaron todos, porque confiaban en su capacidad.

-No -dijo el Conocimiento-, la Previsión y yo hemos construido un avión y en cuanto termine de decirles esto volaremos hasta la isla más cercana.


Las emociones dijeron:

-¡No! ¡Pero no! ¿Qué será de nosotros?


Dicho esto, el Conocimiento se subió al avión con su socia y, llevando de polizón al Miedo, que como no es zonzo ya se había escondido en el motor, dejaron la isla.
Todas las emociones, en efecto, se dedicaron a construir un bote, un barco, un velero... Todas... salvo el Amor.
Porque el Amor estaba tan relacionado con cada cosa de la isla que dijo:

-Dejar esta isla... después de todo lo que viví aquí... ¿Cómo podría yo dejar este arbolito, por ejemplo? Ahh... compartimos tantas cosas...

Y mientras las emociones se dedicaban a fabricar el medio para irse, el Amor se subió a cada árbol, olió cada rosa, se fue hasta la playa y se revolcó en la arena como solía hacerlo en otros tiempos. Tocó cada piedra... y acarició cada rama...
Al llegar a la playa, exactamente desde donde el sol salía, su lugar favorito, quiso pensar con esa ingenuidad que tiene el Amor:

"Quizá la isla se hunda por un ratito... y después resurja... ¿por qué no?"

Y se quedó durante días y días midiendo la altura de la marea para revisar si el proceso de hundimiento no era reversible...

La isla se hundía cada vez más...
Sin embargo, el Amor no podía pensar en construir, porque estaba tan dolorido que sólo era capaz de llorar y gemir por lo que perdería.
Se le ocurrió entonces que la isla era muy grande, y que aun cuando se hundiera un poco, siempre él podría refugiarse en la zona más alta...
Cualquier cosa era mejor que tener que irse. Una pequeña renuncia nunca había sido un problema para él.
Así que, una vez más, tocó las piedritas de la orilla... y se arrastró por la arena... y otra vez se mojó los pies en la pequeña playa que otrora fue enorme...
Luego, sin darse cuenta demasiado de su renuncia, caminó hacia la parte norte de la isla, que si bien no era la que más le gustaba, era la más elevada...
Y la isla se hundía cada día un poco más...
Y el Amor se refugiaba cada día en un espacio más pequeño...

-Después de tantas cosas que pasamos juntos... -le reprochó a la isla.

Hasta que, finalmente, sólo quedó una minúscula porción de suelo firme; el resto había sido tapado completamente por el agua.
Recién en ese momento el Amor se dio cuenta de que la isla se estaba hundiendo de verdad. Comprendió que, si no dejaba la isla, el amor desaparecería para siempre de la faz de la Tierra...
Caminando entre senderos anegados y saltando enormes charcos de agua, el Amor se dirigió a la bahía.
Ya no había posibilidades de construirse una salida como la de todos; había perdido demasiado tiempo en negar lo que perdía y en llorar lo que desaparecía poco a poco ante sus ojos.
Desde allí podría ver pasar a sus compañeros en las embarcaciones. Tenía la esperanza de explicar su situación y de que alguno de sus compañeros lo comprendiera y lo llevara.
Buscando con los ojos en el mar, vio venir el barco de la Riqueza y le hizo señas. La Riqueza se acercó un poquito a la bahía.

- Riqueza, tú que tienes un barco tan grande, ¿no me llevarías hasta la isla vecina? Yo sufrí tanto la desaparición de esta isla que no pude fabricarme un bote...

Y la Riqueza le contestó:

-Estoy tan cargada de dinero, de joyas y de piedras preciosas, que no tengo lugar para ti, lo siento... -y siguió su camino sin mirar atrás.

El Amor se quedó mirando, y vio venir a la Vanidad en un barco hermoso, lleno de adornos, caireles, mármoles y florcitas de todos los colores. Llamaba muchísimo la atención.
El Amor se estiró un poco y gritó:

Vanidad... Vanidad... llévame contigo!


La Vanidad miró al Amor y le dijo:
-Me encantaría llevarte, pero... ¡tienes un aspecto!... ¡estás tan desagradable... tan sucio y tan desaliñado!... Perdón, pero creo que afearías mi barco -y se fue.

Y así, el Amor pidió ayuda a cada una de las emociones. A la Constancia, a la Sensualidad, a los Celos, a la Indignación y hasta al Odio. Y cuando pensó que ya nadie más pasaría, vio acercarse un barco muy pequeño, el último, el de la Tristeza.

-Tristeza, hermana -le dijo-, tú que me conoces tanto, tú no me abandonarás aquí, eres tan sensible como yo... ¿Me llevarás contigo?

Y la Tristeza le contestó:

-Yo te llevaría, te lo aseguro, pero estoy taaaaan triste... que prefiero estar sola -y sin decir más, se alejó.

Y el Amor, pobrecito, se dio cuenta de que por haberse quedado ligado a esas cosas que tanto amaba, la isla iba a hundirse en el mar hasta desaparecer.

Entonces se sentó en el último pedacito que quedaba de su isla a esperar el final...

De pronto, el Amor escuchó que alguien chistaba:

-Chst-chst-chst...

Era un desconocido viejito que le hacía señas desde un bote de remos.
El Amor se sorprendió:

-¿A mí? -preguntó, llevándose una mano al pecho.
-Sí, sí -dijo el viejito-, a ti. Ven conmigo, súbete a mi bote y rema conmigo, yo te salvo.


El Amor lo miró y quiso explicar:
-Lo que pasó fue que yo me quedé...
-Yo entiendo
-dijo el viejito sin dejarlo terminar la frase-, sube.
El Amor subió al bote y juntos empezaron a remar para alejarse de la isla.
No pasó mucho tiempo antes de ver cómo el último centímetro que quedaba a flote terminó de hundirse y la isla desaparecía para siempre.

-Nunca volverá a existir una isla como ésta -murmuró el Amor, quizá esperando que el viejito lo contradijera y le diera alguna esperanza.
-No -dijo el viejo- como ésta, nunca.

Cuando llegaron a la isla vecina, el Amor comprendió que seguía vivo.
Se dio cuenta de que iba a seguir existiendo.
Giró sobre sus pies para agradecerle al viejito, pero éste, sin decir una palabra, se había marchado tan misteriosamente como había aparecido.
Entonces, el Amor, muy intrigado, fue en busca de la Sabiduría para preguntarle:

-¿Cómo puede ser? Yo no lo conozco y él me salvó... Todos los demás no comprendían que me hubiera quedado sin embarcación, pero él me ayudó, él me salvó y yo ni siquiera sé quién es...

La Sabiduría lo miró a los ojos largamente y dijo:

-Él es el único que siempre es capaz de conseguir que el amor sobreviva cuando el dolor de una pérdida le hace creer que es imposible seguir. El único capaz de darle una nueva oportunidad al amor cuando parece extinguirse. El que te salvó, Amor, es el Tiempo.


viernes, 19 de septiembre de 2008

Crimen


Ultimamente los días y las noches se parecen demasiado.
Si algo aprendí en esta ciudad es que no hay garantías, nadie te regala nada.
Todo podía terminar terriblemente mal pero este caso habia que resolverlo.

10 PM: La noche cae sobre Madrid. Patatas Bravas y Croquetas de Jamón, Marianita... hoy toca sesión...

1 AM: Cerati y a la cama con un tiro en la sien o 139 Lexatins.

jueves, 18 de septiembre de 2008

Huida...



Paso la noche en vela intentando curar cicatrices de pasión… hago el amor con el dolor, se me escapa una lagrima pero no te dejo verla. Muero en el intento de huir de mi pasado, huir, huir… llevo toda la vida huyendo pero ha llegado la hora de la introspección. Todo se derrumba a mis pies y nada puedo hacer por evitarlo. El dolor se hace insoportable y, una vez mas, no consigo mitigarlo.

Lo reconozco, antes de olvidarte debo llorarte, hacer un paréntesis, asumir esta herida y dejar de amanecer entre flores muertas y muñecos rotos.

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Quelqu'un m'a dit

Ojala sintieras cuanto mata tu ausencia, cuanto lastima la duda, cuanto desangra la punzante pregunta… ¿te enamoraste de mi o de tu proyección ideal?

Poco a poco se me deshace el alma, tu manera de amarme es como un ácido corrosivo… me sitúas en un plano superior del que luego caigo desplomada y tu no estas para sujetarme, te apartas y me hundo.

Este amor incondicional del todo o nada, este amor desesperado, irracional, apasionado y despreciable…este amor utópico que vive y muere en mi… y me pregunto… ¿Existió nuestro amor? ¿O fue tan solo el mío? Mi amor, mis deseos, mi pasión, mis ganas…

lunes, 15 de septiembre de 2008

En el intento

Intento seguir al conejo blanco. Intento mantenerme hambrienta, alocada...
Intento conducir mi vida, encontrar mi luz, mi espacio... encontrarme.
Intento levantarme despues de caer, de mantener la frente alta y el pecho henchido.
Intento ser orgullosa y humilde, alejar la soberbia y el enfado.
Intento entender las ofensas y olvidar las heridas a partes iguales.
Intento mantenerme firme en mi camino sin descuidar los quiebros, atenta a los cambios del viento.
Intento caminar sin tristeza a la orilla del mar. Intento perder el miedo a mi misma, a esta soledad.
Intento aprender a decir te quiero, a mantener el alma siempre abierta, a no perder la fé en los sueños, a soñar a todas horas...
Intento comprender que no siempre son como queremos e intento, también, disfrutar aquellos que son tal y como los soñamos...
Intento desatarme aún cuando ni mis costillas se pueden mover soportando el peso de las cuerdas.
Intento mantener las velas siempre encendidas, las manos siempre calientes.... manteniendo el frío siempre al otro lado de mi ventana.
Intento no temer al tiempo, no encogerme cuando el pasado se asoma entre las sabanas, no llorar cuando no debo y hacerlo siempre que quiero.

Y allí estoy porque no se si quiero estar aquí, aunque lo intento.

martes, 9 de septiembre de 2008

Coldplay Madrid 2008 - Lovers in Japan - Reign of Love


Coldplay presentó en Madrid su disco 'Viva la vida'... y, afortunadamente, pude gozar de un concierto que superó altamente mis expectativas.

Con un Palacio de Deportes abarrotado bailiando el vals inicial, o al "oeee" español entre tema y tema...

...Chris Martin increiblemente loco demostrando sus dotes de buen músico y compositor, irradiando vitalidad y energía continuamente...

El domingo nada pudo desilucionar a un seguidor de Colplay. Temas deliciosamente escogidos, una fiesta alucinante de luz y color, un público eufórico y entregado...VIVA LA VIDA!

Este es uno de los momentos que, según transcurría, sabía que se quedaría grabado en mi mente para siempre.

Gracias Atilio, me has regalado una noche mágica.

viernes, 5 de septiembre de 2008

Y uno aprende...




Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia

entre sostener una mano y encadenar un alma,

y uno aprende que el amor no significa recostarse

y una compañía no significa seguridad

y uno empieza a aprender.

Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas

y que uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos

y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,

porque el terreno del mañana es demasiado inseguro para planes....

y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.

Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado,

hasta el calorcito del sol quema.

Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,

en lugar de esperar que alguien le traiga flores.

Y uno aprende que realmente puede aguantar,

que uno realmente es fuerte,

y que con cada adiós uno aprende.



Jorge Luis BORGES



Pauline Croze - T'es beau


Estas ganas de tenerte al frente y quererte hasta morderte.

Devorarte lentamente, hasta saciarme de ti o simplemente llenarte de besos
y acariciar hasta el último centímetro de piel y todos los rincones de tu alma.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

como un Viernes 3 AM





La fiebre de un sábado azul y un domingo sin tristezas.
Esquivas a tu corazón y destrozas tu cabeza,
y en tu voz, sólo un pálido adios
y el reloj en tu puño marcó las tres.
El sueño de un sol y de un mar
y una vida peligrosa cambiando lo amargo por miel
y la gris ciudad por rosas
te hace bien, tanto como hace mal
te hace odiar, tanto como querer y más.
Cambiaste de tiempo y de amor y de música y de ideas
Cambiaste de sexo y de Dios
de color y de fronteras
pero en sí, nada más cambiarás
y un sensual abandono vendrá y el fin.
Y llevas el caño a tu sien
apretando bien las muelas
y cierras los ojos y ves todo el mar en primavera
bang, bang, bang
hojas muertas que caen,
siempre igual,
los que no pueden más se van.

Charly Garcia


Oscuros en la noche sola






Y el mundo no para de hablar… las voces salen disparadas por todos lados. Lo curioso es que no pongo atención a nada… esta noche ando viviendo en mi mundo sensorial extraviada en plena vía láctea.

Elijo el crecimiento y el desarrollo para motivarme, y pensando en ello recuerdo sus palabras tan latentes, tan punzantes…

- “Si colocas una piedra bajo el lente de un microscopio y la observas con cuidado notarás que no cambia nunca. Pero, si pones un trozo de coral bajo el mismo lente podrás darte cuenta que éste crece y cambia. Conclusión: el coral está vivo. La única prueba de la vida es el crecimiento.”

No consigo dormir, será mejor que riegue las plantas. Aguanto el tiempo sin pensar, cada minuto es como cien. Necesito estar en movimiento, oxigenar este espacio, acelerar mi pulso…




lunes, 1 de septiembre de 2008

Adios Tabaco




Tal y como me comprometí, anoche fumé el que ha sido el último cigarrillo de mi vida. A partir de este momento comienza mi lucha contra el famoso “mounstrito” que llevo dentro.

Llevo todo el mes pensando en ello y creo que ha llegado el momento de despojarme de este vicio maldito que me quita el aire.

Quiero recuperar el buen aliento y no ahuyentar a nadie de mi lado. Quiero que mi ropa deje de apestar a tabaco. Quiero que mis besos no sepan a cenicero añejo. Quiero dejar de quemar camisas, abrigos, la mano de mi novio y el vestido que tanto soñé y tan rápido estropee. Quiero recuperar mi sonrisa blanca, limpia y fresca. Quiero gastarme el dinero en cosas mas gratificantes. Quiero ahorrar en tintorería y librarme de esta horrible esclavitud.

Por todo ello, llevo ya 7 horas 17 minutos y 27 segundos sin fumar. Gracias a todos los que me han ayudado no solo en éste sino en todos mis intentos... Mamá! Creeme, voy a dejarlo!