martes, 15 de julio de 2008

Como La Lluvia En Buenos Aires




Cuando las cartas salen malas

y van los dioses a lo suyo

cuando la luna es un anuncio de neón

cuando el silencio te acorrala

y te hipotecan el orgullo,

cuando el crepúsculo te pega un bofetón,

cuando las calles se amontonan

cuando los sueños se marchitan

cuando el teléfono se olvida de sonar

cuando las drogas decepcionan

cuando la sangre se encabrita

cuando los bares coleccionan soledad.


Y demasiadas pocas veces se merece

la vida una canción

y demasiadas madrugadas amanece

nublado el corazón

y demasiadas noches paso

durmiendo solo al raso

bajo el reloj de la puerta del sol

con un frio del demoño

preguntandole al otoño

quien le puso ese nombre de estación.


Cuando se afilan las navajas

cuando conspiran los espejos

cuando enloquecen las agujas del reloj

cuando se rompen las barajas

cuando los niños nacen viejos

cuando la carne sabe a carne de cañon

cuando los angeles blasfeman

cuando las cartas llegan tarde

cuando la aurora es una nueva decepción

cuando los besos envenenan

o cuando llueve en Buenos Aires

cuando se pone el sol en la imaginación


Y demasiadas pocas veces se merece ...


Juan Carlos Baglietto


2 comentarios:

Mauro dijo...

Me hiciste recordar un paseo bajo la lluvia en Buenos Aires, en febrero, en Puerto Madero y luego subiendo por Avenida de Mayo.

Fue un tiempo en parte para dejar atrás el que describes.

Cariños.

Berenizz dijo...

Hermoso! Hermoso!
Muy Buenos Aires la verdad.
Que ciudad hermosa, acabo de volver y ya la extraño.
Lei todo, pero no sabía bien que comentar.
Hermoso blog.

Besos!