miércoles, 3 de septiembre de 2008

como un Viernes 3 AM





La fiebre de un sábado azul y un domingo sin tristezas.
Esquivas a tu corazón y destrozas tu cabeza,
y en tu voz, sólo un pálido adios
y el reloj en tu puño marcó las tres.
El sueño de un sol y de un mar
y una vida peligrosa cambiando lo amargo por miel
y la gris ciudad por rosas
te hace bien, tanto como hace mal
te hace odiar, tanto como querer y más.
Cambiaste de tiempo y de amor y de música y de ideas
Cambiaste de sexo y de Dios
de color y de fronteras
pero en sí, nada más cambiarás
y un sensual abandono vendrá y el fin.
Y llevas el caño a tu sien
apretando bien las muelas
y cierras los ojos y ves todo el mar en primavera
bang, bang, bang
hojas muertas que caen,
siempre igual,
los que no pueden más se van.

Charly Garcia


1 comentario:

Uqbar dijo...

Es difícil tener un domingo sin tristezas, siempre odie ese día. Anclado a la resaca, lleno de una lánguida nostálgia,...